El límite final de carrera cerrado es un dispositivo de seguridad utilizado en ascensores para detectar la posición más baja a la que puede llegar la cabina o el contrapeso. A diferencia del límite final de carrera abierto, que se activa en la posición más alta, el límite final de carrera cerrado se activa en la posición más baja permitida.

Al igual que el límite final de carrera abierto, el límite final de carrera cerrado consta de un interruptor y un actuador. El interruptor está ubicado en una posición fija dentro del pozo del ascensor, mientras que el actuador se encuentra en la cabina o el contrapeso y se activa al hacer contacto con el interruptor cuando alcanza la posición de máxima bajada permanente.

Cuando la cabina o el contrapeso alcanzan el límite final inferior, el actuador hace contacto con el interruptor, lo que activa el interruptor y detiene el movimiento del ascensor. Esto evita que la cabina o el contrapeso desciendan más allá de la posición máxima permitida y garantiza la seguridad de las personas y los equipos.

Al igual que el límite final de carrera abierto, el límite final de carrera cerrado es un componente esencial en los sistemas de seguridad de los ascensores. Su correcta instalación y ajuste durante el proceso de instalación y mantenimiento del ascensor son fundamentales para garantizar su funcionamiento fiable y preciso.

En resumen, el límite final de carrera cerrado es un dispositivo de seguridad utilizado en ascensores para detectar la posición más baja a la que puede llegar la cabina o el contrapeso. Se compone de un interruptor y un actuador que se activan cuando la cabina o el contrapeso alcanzan la posición de máxima bajada permitida. Su función es detener el movimiento del ascensor y garantizar la seguridad al evitar que se descienda más allá de los límites establecidos.